Episodio 5: La España vacía y vaciada
Transcripción:
¿Sabes a qué nos referimos? ¿Has escuchado alguna vez la expresión “La España vacía y vaciada?
Recientemente he leído un artículo muy interesante, titulado «la España vaciada» del periodista Manuel I. Cabezas González, en el periódico de Aragón.
En primer lugar, el autor nos explica a qué nos referimos cuando hablamos de la ´España vaciada´.
Desde principios del siglo XX, España ha sufrido una emigración continua. Con el paso de los años, zonas enteras del territorio español se han ido vaciando. Al principio del siglo XX, la emigración se dirigió hacia América Latina. Después, en los años 50, 60 y 70 se produjo una nueva emigración hacia los países europeos. También muchos españoles abandonaron los pueblos y se fueron a vivir a las grandes ciudades y capitales de España.
A esto se le conoce hoy como la “España vaciada”; la “España vacía”; o la “España vaciada y vacía”.
En pocas palabras, muchas personas abandonan las zonas rurales para irse a vivir a las ciudades. Como resultado los pueblos se quedan con pocos habitantes, en su mayoría gente mayor. Incluso hay muchos pueblos abandonados.
¿Ocurre algo parecido en tu país o en el lugar donde vives? ¿Qué opinas de este fenómeno? ¿Prefieres vivir en el campo o en la ciudad? ¿Por qué?
Te menciono algunos datos interesantes. Los he leído también en el periódico de Aragón.
Al observar la imagen nocturna de España desde un satélite, veremos España dividida en dos. Por un lado, la “España llena de gente”: la España urbana, localizada en la periferia de la península ibérica y en algunas zonas del interior (Madrid, Zaragoza, Valladolid).
Es el 30% del territorio con el 90% de la población. Por otro lado, la “España vaciada y vacía”: los pueblos, las zonas rurales o de campo. Ocupan el 70% del territorio y solo tienen el 10% de la población.
Más de la mitad de los municipios en España tienen menos de 1.000 habitantes. La gran mayoría tienen entre 100 y 500 vecinos.
España avanza a dos velocidades: la España urbana con ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza, Málaga, Sevilla o Bilbao. Después una España rural y provincial, con poca población y sin recursos. Es una España olvidada. Casi toda la riqueza se concentra en ciudades como Madrid, Barcelona, San Sebastián y Bilbao.
Te voy a poner un ejemplo. ¿Has oído hablar de la provincia española de Soria?
Soria es una provincia de Castilla y León, en el centro de España. Su capital, Soria, junto al río Duero, es conocida por las calles medievales y su arquitectura románica.
Soria es, con diferencia, la provincia española menos poblada, con una densidad de 8,60 habitantes/km²: una de las menores de la Unión Europea.
La población de toda la provincia es de poco más de 88 000 habitantes. En 1900 tenía más de 155 000 habitantes.
Tiene, además, una de las poblaciones más envejecidas de Europa: el 26,7%, tiene más de 65 años.
La provincia ha perdido más del 40% de su población en los últimos 50 años.
De los 183 municipios que tiene, más de la mitad tienen menos de 100 habitantes. Sin duda, Soria es uno de los ejemplos más claros de lo que se llama “la España vaciada”.
¿Qué te parece que pueblos enteros desaparezcan?
Un apunte lingüístico antes de terminar. Hemos hablado de “La España vacía, vaciada”.
Ahí va una pregunta: ¿Qué es lo que significan estas expresiones?, ¿crees que significan lo mismo?
Respuesta: según la FUNDEU (fundación del español urgente):
Tanto España vacía como España vaciada son expresiones válidas. Las dos se refieren a zonas con muy poca población.
Pero hay algunas diferencias.
El adjetivo vacío significa ‘con poca o ninguna gente’. Por tanto, la expresión la España vacía se refiere a esas partes de España que no tienen de población, o tienen pocos habitantes.
Por otro lado, la voz vaciada significa ‘dejar algo vacío o sin contenido’. En este caso, se destaca el proceso de quedarse sin habitantes.
Dicho más sencillamente: La España vacía nos muestra el estado actual de muchas poblaciones. La España vaciada, en cambio, nos señala el proceso que padecen muchas poblaciones que se van quedando cada vez más con menos habitantes.
Y recuerda…¡se hace el idioma al hablar!
